Hoy tenemos el placer de charlar con uno de los artistas emergentes que más fuerte está pisando dentro del Schranz. Puede que lo hayas descubierto en su explosivo B2B con Matt P en Unlocked o por su reciente debut en DURO Festival este mes de abril. Hablamos, cómo no, de MVGRI, joven talento catalán que, con solo 24 años, ya está sacudiendo la escena con un estilo propio, crudo y sin concesiones.
Charlamos con él sobre sus orígenes, el presente que está viviendo y lo que se viene.
— Nosotros te tenemos más que ubicado, pero habrá gente que acaba de ver tu nombre y aún no te tiene en el radar. Para los que llegan nuevos: ¿quién es MVGRI?
Soy un artista catalán enfocado en el Schranz y el serious techno. Desde que empecé, he tenido claro que hay que revivir los sonidos antiguos, el conocido “hard techno” de antes. La música para mí es una forma de liberar energía, de conectar con la gente, de decir cosas sin palabras, y el Schranz me lo proporciona todo. Detrás de MVGRI hay mucha pasión, horas de estudio y la ilusión de un niño que siempre ha querido ser DJ.
— Podrías haber tirado por mil estilos dentro de la electrónica, pero elegiste el Schranz. ¿Qué tiene este sonido para ti que no tienen los demás? ¿En qué momento sentiste que ese era “tu camino”? ¿Tienes algún referente que te inspirara al principio?
El Schranz tiene una agresividad y una pureza que me atraparon desde el primer momento. No fue una elección racional; más bien sentí que el Schranz me eligió a mí. Empecé escuchando a artistas como Sven Wittekind, Frank Kvitta o Mario Ranieri, y fue como encajar una pieza en un puzle. Sentí que ese era el lugar donde mi sonido tenía sentido, mi burbuja.
— Verruckt Collective suena a algo más grande que un simple grupo de amigos pinchando. ¿Cómo nace la idea? ¿Qué representa para ti? ¿Es solo un colectivo o hay una filosofía detrás?
Verruckt nació como una necesidad de crear comunidad, pero también como una forma de volver al club underground donde muchos de nosotros apostamos por escuchar el hard techno de los 2000. No es solo una fiesta, es un movimiento. Apostamos por la crudeza, por no maquillar el sonido ni la experiencia. Verruckt es energía, locura y autenticidad.
— Tu carrera acaba de arrancar, pero ya te hemos visto compartiendo cartel con artistas de alto calibre en el DURO Festival. ¿Cómo se vive algo así desde dentro? ¿Te dio vértigo ver tu nombre junto a SNTS o Fátima Hajji, o fue más motivación que otra cosa?
Fue un momento muy potente. Evidentemente, impone ver tu nombre al lado de gente a la que has seguido durante años, pero lo viví como una validación. No desde el ego, sino desde la motivación. Me dije: “Vale, Magri, algo estás haciendo bien. Ahora a seguir empujando más fuerte, deja huella”.
— Imagino que cada evento deja algo, pero DURO ha sido especial por muchas cosas. ¿Tienes alguna anécdota de esa fecha que se te haya quedado marcada? Algo divertido, loco o emotivo, lo que sea.
Son tantas cosas maravillosas que podría decir de DURO… Desde el momento en el que me vi ahí arriba, las luces, mi nombre en unas pantallas enormes… Lo recuerdo y me saltan las lágrimas, en serio. Sin embargo, me quedaría con las palabras del stage manager: “Arrancamos en 3, 2, 1…”. Fue una descarga de adrenalina brutal.
— Vamos a hablar de ese momentazo en Unlocked, el B2B con Matt P. Para muchos fue la revelación. ¿Cómo lo viviste tú desde la cabina? ¿Qué sensaciones te llevaste de esa noche? ¿Cómo fue conectar así con el público?
Fue mágico. Con Matt P hay una conexión natural; no necesitamos hablarnos mucho para entendernos musicalmente. Desde la cabina sentí que el público estaba completamente entregado, que entendían lo que queríamos transmitir. Esas noches te recuerdan por qué haces lo que haces. Por parte de Unlocked, no defrauda de ninguna manera: cualquier fiesta que organice esta gente, sabes que será un diez.
— Justo ayer día 23 de abril, escasos días después de tu debut en DURO se anunció entrada en una de las agencias de artistas más respetadas a nivel nacional y fuera de nuestras fronteras, Hireout Bookings. ¿Ha sido esta una confirmación más de que estas yendo por el camino correcto? Cómo lo interpretas tú?
Totalmente. Fue un momento muy especial porque llegó justo después de un hito como DURO, como si el universo me dijera: “sigue por ahí, no frenes”. Entrar en Hireout es un paso enorme para mí, no solo por lo que representa a nivel profesional, sino por el respaldo que supone. Que una agencia con esa trayectoria confíe en mí es una señal de que algo estoy haciendo bien. Pero lejos de relajarme, me lo tomo como más responsabilidad, más hambre de seguir creciendo y demostrando.
—¿Qué esperas de esta nueva etapa con Hireout?
Espero que sea una etapa de expansión, tanto personal como artística. Estar con Hireout me abre puertas que antes parecían lejanas, pero también me da una estructura para centrarme en lo que realmente importa: construir mi esencia y compartirla con el resto del mundo. Quiero que esta alianza me permita llegar a nuevos públicos, pisar cabinas que antes solo veía desde la pista, y seguir rodeándome de gente que me empuje a crecer y disfrutar del camino, que no es corto.
— Tú formas parte de una generación que ha crecido con redes sociales, y eso cambia las reglas del juego. ¿Cómo crees que afectan las redes al crecimiento de un artista en la electrónica? ¿Te parecen una herramienta clave o a veces un arma de doble filo?
Son ambas cosas. Por un lado, te dan visibilidad y la posibilidad de conectar con gente de todo el mundo. Por otro, pueden generar una presión brutal. A veces parece que importa más un clip viral que un set bien hecho. Hay que aprender a usar las redes, pero sin dejar que te definan.
— Hay un aura romántica en esa época en la que la gente iba a las raves sin móviles, sin grabar nada, solo a vivir el momento. Aunque no lo vivieras, ¿crees que nos estamos perdiendo algo en la experiencia de clubbing actual?
Totalmente. Yo intento que mis sets sean una experiencia, contar una historia, y eso solo se logra si la gente está presente. Me encanta cuando veo a alguien con los ojos cerrados, bailando sin grabar nada. Esa conexión directa, sin filtros, es lo más puro que tiene la música electrónica.
— Hoy en día parece que muchos artistas emergentes sienten más presión por viralizarse que por construir un sonido auténtico. ¿Has sentido tú esa presión? ¿Dónde está el equilibrio entre ser fiel a uno mismo y moverse en este ecosistema tan rápido?
Sí que la he sentido, claro. Pero he aprendido que si no construyes algo con raíces, tarde o temprano se cae. Prefiero crecer más lento, pero con identidad. Lo viral se olvida rápido y lo auténtico queda. El equilibrio está en usar las herramientas sin traicionarte a ti mismo.
— Y para toda la gente que aún quiere más de ti… ¿Qué se viene para MVGRI? Sabemos que no siempre se puede contar todo, pero… ¿hay alguna fecha, lanzamiento, colaboración o locura en camino que nos puedas adelantar?
Puedo adelantar que estoy trabajando en un EP que verá la luz este verano, con una línea muy cruda, muy “yo”. Además, hay un par de fechas internacionales pendientes que me tienen muy emocionado. Y, sin dudarlo, el debut con mi familia de Tramunfest como fecha más esperada.
— Si pudieras visualizar tu corto/medio plazo ideal en la escena, ¿cómo se ve? ¿Hay algún lugar donde sueñes pinchar, algún artista con el que quieras compartir cartel, o algún reto personal que te estés marcando?
Me encantaría pinchar en Outworld como meta, al igual que con la familia de 44Label Group. He estado como oyente en esas fiestas y creo que no hay otras que me representen más. Y compartir cartel con Klangkuenstler sería volar, no me lo podría llegar a creer jamás. A nivel personal, mi reto es mantenerme fiel a mi sonido sin caer en lo fácil. Quiero seguir aprendiendo, explorando y demostrar al mundo que el hard techno de los 2000 jamás se fue.
— Seguro que te escribe gente diciendo “quiero hacer lo que tú haces”. Para los que están empezando: ¿qué consejo sincero les darías? No el típico de “sé constante”, sino algo real que te hubiera gustado que te dijeran a ti.
Les diría que se enamoren del proceso. Que no busquen solo la validación externa como lo más importante, ese es el principal error. Enfócate en tu sonido, échale muchas horas aun sabiendo que puedes no gustarle a algunos, disfruta del proceso y no te vendas por gustar a otros. Mantente firme siempre a tu estilo, eso es lo que te hará destacar en la escena.
— Y ya para cerrar, en este camino tan intenso que llevas: ¿qué es lo más valioso que has aprendido hasta ahora, ya sea sobre música, escena o incluso sobre ti mismo?
He aprendido que el respeto y la autenticidad te abren más puertas que cualquier estrategia. Que a veces hay que dejar atrás muchas cosas para seguir adelante y que, cuanto más honesto eres contigo mismo, más fuerte resuena tu mensaje. En la música y en la vida.
Schranz is love, schranz is life
