Si tu corazón late a 150 BPM o más, esta entrevista es para ti. Conversamos con DJ Xavi BCN, figura clave de la música mákina y del hard trance en Barcelona, mítico residente de la sala Chasis —auténtico templo del sonido acelerado— y productor incansable cuyos himnos siguen incendiando pistas dentro y fuera de España. Su trayectoria se ha forjado a base de temazos y sesiones inolvidables que hoy son auténtico culto tanto dentro como fuera de España. En esta entrevista exclusiva repasamos las anécdotas que marcaron su evolución, escarbamos en su método de producción y adelantamos los lanzamientos con los que piensa seguir dejando huella en la historia de la música más cañera.
Para situarnos en tus orígenes: cuando eras un niño y aún no soñabas con la cabina, ¿qué profesión o sueño de futuro te rondaba la cabeza y por qué te atraía?
Creo que, como todos, quería ser futbolista, bombero o policía. Lo de policía lo descarté primero porque lo del mal no me va mucho; lo de bombero lo vi muy arriesgado y no tengo aptitudes para ser futbolista, así que me decanté por la música, una de las grandes pasiones de toda mi familia.
¿Recuerdas la chispa exacta que te llevó a comprarte tus primeros platos y una mesa de mezclas? Cuéntanos ese momento en el que decidiste empezar a pinchar seriamente.
El germen de pinchar se me metió tocando los platos de Dani, un amigo de toda la vida que tenía un bar debajo de mi casa. A partir de ahí fueron creciendo esa inquietud y esas ganas de liarla más. La verdad es que no sé cuál fue el día exacto ni cómo conseguí mis primeros platos, pero me los compré. Y tengo que decir una cosa: todavía conservo mis primeros Technics.
Comentabas que la producción llegó algo después. ¿Cómo describirías tu proceso de aprendizaje en los 90, cuando apenas había tutoriales en línea, DAWs accesibles ni grandes comunidades digitales?
Antes, producir era más complicado que hacer encaje de bolillos. Recuerdo que estuve trabajando para varios estudios de los cuales yo no era propietario y, aproximadamente en el 97 o 98, compramos una Supernova, una Mackie, dos Roland y dos Akai 3000 XL. Antes, hacer cada canción era una odisea, era terrible. Tenías que saber de programación, automatizar cada pequeño parámetro desde Cubase… Era una película de terror comparado con lo que hay ahora, que quizás es demasiado fácil.

Al comenzar tu carrera, casi todo estaba por inventar. Desde tu perspectiva de veterano, ¿cuáles son hoy los principales retos que enfrenta un DJ emergente y que antes no existían?
La forma de trabajar de antes y la de ahora son completamente diferentes. Antes, querías hacer algo distinto y llegar a algo espectacular. A día de hoy, la fórmula es: “esto funciona, lo quiero hacer y voy a buscar la manera de llegar lo más rápido posible a lo más alto con algo que ya ha hecho otro”. Y, al final, sale un producto con una fecha de caducidad muy, muy corta.
¿Cómo fue tu camino en esa escena desde tus primeros bolos hasta entrar en Chasis?
Tuve la suerte de que, en todos los sitios en los que pinché como residente antes de Chasis, fue porque me vinieron a buscar. En cualquier caso, la situación para trabajar antes era bastante más sencilla, puesto que había mucha más variedad. Había muchos garitos pequeños; no estaba todo controlado por cuatro personas que boicotean o hacen el vacío a los artistas a los que no quieren ver brillar.
Has visto nacer y desaparecer infinidad de sellos. ¿Cuáles han marcado tu sonido a lo largo de los años y qué etiquetas consideras hoy imprescindibles —dentro y fuera de España— para entender el hard dance?
Sin lugar a dudas: Bonzai Records, sello del cual tengo la satisfacción de poder decir que ahora mismo he fichado con ellos y tengo un EP de cuatro cortes en camino que espero que salga antes del final de año. Luego hay muchos otros sellos referentes como EDM, Frankfurt Beat y muchos de importación, además de sellos nacionales como Max Music, DJ’s At Work, Makinaria Records o Bit Music. Todos estos sellos han llenado las sesiones en las que he trabajado de temazos y melodías que han hecho a la gente disfrutar como nunca.
Se percibe un renovado interés por la mákina fuera de nuestras fronteras. Desde tu experiencia en cabinas internacionales, ¿crees que estamos ante una nueva ola global o es sólo un espejismo pasajero?
No lo veo tan claro. Quizá no soy tan optimista porque ya he visto varias veces el supuesto renacer de la mákina. Sí que estamos en un muy buen momento, pero yo ya he estado pinchando mákina en Finlandia, Tokio, Los Ángeles, Roma, Francia y en tantos otros sitios sin esa bomba de humo de la que se acompañan los grandes salvadores de la mákina.

¿Hacia qué direcciones crees que evolucionará la escena electrónica durante los próximos años?
El Hard Techno ha estado muy de moda. Ahora ha subido el Hard Bounce. Uno es más agresivo y otro es más divertido. Yo creo que estos estilos de tendencia tienen una vida muy corta. Siempre tendremos la makina, siempre tendremos el Techno, siempre tendremos el Hard Trance, y creo que todo esto llega un momento en que se compagina con los estilos en tendencia. Al final, todo hace grande y rico el abanico musical que tenemos en nuestro país. ¡No debemos olvidarnos de que somos la puta bomba!
En un mercado saturado de lanzamientos, ¿qué ingredientes creativos y emocionales son indispensables para que una producción conecte de verdad con la pista y deje huella?
No hay una fórmula mágica que vaya a convertir un tema en un éxito. Yo creo que lo más importante es disfrutar con lo que haces; eso, a resumidas cuentas, se transmite a través del tema. Hay que partir de que nuestro estilo es para divertirse, así que diviértete tú antes y se divertirán los demás.
La vida de DJ implica aeropuertos y madrugones. ¿Disfrutas de esos viajes maratonianos alrededor del mundo o valoras más quedarte cerca de casa? ¿Qué te aporta cada opción?
A mí lo que me gusta es pegarme la fiesta y, si tengo que hacerme 10 horas de viaje para pegarme la fiesta, pues me las pego. Ahora en serio: es muy bonito ver diferentes culturas y diferentes formas de entender la música. Ver a tanta gente unida bajo el techo de nuestra música mákina y el hard trance te hace darte cuenta de cómo somos tan diferentes y tan iguales al mismo tiempo.
Entre las nuevas generaciones, ¿hay algún artista que haya llamado tu atención y por qué?
Totti es un chico con una cultura musical que para nada concuerda con su edad, porque es muy joven, y entiende el trasfondo de muchas canciones de Hard Trance de una manera que a mí me ha costado años y sesiones de trabajo. Pero, además de él, hay muchísimos otros talentos. En este país, otra cosa no, pero talento para la jarana hay a punta pala.

Mirando al futuro inmediato, ¿qué proyectos y colaboraciones tienes en marcha y qué metas profesionales te ilusionan a medio plazo?
Lo primero es sacar una colaboración que tenemos con DJ Gollum que saldrá con EDM Records, otro de los estandartes de la música Hard Trance en Europa. Luego, que salga este EP de Bonzai Records, el cual creo que va a alucinar a la gente y dará pie a que más de uno abra los ojos y vea que hay mucho más allá de la música que te dan día a día.
Por ir concluyendo, vamos con una pregunta off-topic. Cuando logras desconectar del estudio y los escenarios, ¿cómo te gusta invertir tu tiempo libre? ¿Tienes algún hobby que te ayude a recargar energías fuera del mundo musical?
La verdad es que, cuando no estoy pinchando, produciendo o en reuniones, me dedico a dormir o comer, porque es lo único para lo que me queda tiempo. El trabajo no me deja espacio para mucho más.
Muchas gracias por tu tiempo, Xavi, estaremos atentos a tus futuros lanzamientos.