La escena techno de Barcelona vive un momento de efervescencia, y Flug junto a Les Enfants Brillants se suman con una nueva propuesta semanal: Noizer, que arranca el jueves 8 de mayo.
Hablamos con Flug, impulsor del ciclo y figura clave en la evolución del género en la ciudad, sobre este nuevo proyecto, su visión del techno y la esencia del underground.
Empecemos por “Noizer”, tu nuevo proyecto semanal en Les Enfants Brillants. ¿Qué te motivó a lanzar un concepto de techno los jueves y cómo planeas diferenciarlo del resto de propuestas en la ciudad?
“Noizer” nace de una necesidad personal: recuperar un espacio semanal donde el techno de culto sea el eje central. Es un proyecto que recoge el espíritu de iniciativas previas como Insert o Rezonanz, donde lo importante era la música, no la apariencia ni la validación social. Queremos que la gente conecte con la pista, no con su móvil.
Apostamos por sesiones largas, de tres horas por artista, baños sin género, precios accesibles en barra y una política de puerta basada en la actitud, no en la estética. Buscamos un entorno seguro para todas las identidades.
En definitiva, es un espacio para quienes entienden el techno como un lenguaje, no como una moda.

El alias Linkan Ray tiene un papel especial en “Noizer”. ¿Qué representa para ti y qué atmósferas podemos esperar en sus actuaciones?
Linkan Ray es mi proyecto más conceptual y purista. Es el único alias con el que tocaré en Noizer, porque representa la visión que queremos comunicar: un techno introspectivo, sin necesidad de validación externa ni protagonismo del ego.
El club tiene la acústica y las condiciones ideales para sesiones en vinilo, y eso es precisamente lo que haré como Linkan Ray.
Busco un techno crudo, con texturas, sin sobreproducción y siempre conectado a la raíz.
¿Puedes adelantarnos algo especial que estés preparando para las próximas ediciones de “Noizer” y “Flug Invites”?
Lo que más disfruto es sorprender al público con artistas que quizá no conocían y que terminan cautivando. Tanto en Noizer como en Flug Invites hay un trabajo de curaduría muy meticuloso, con propuestas sólidas aunque no siempre masivas.
Me interesa generar descubrimiento, no repetir fórmulas. Hay talento increíble en todo el mundo; solo hay que darles espacio. Ese es el leitmotiv de estos proyectos.
Hablemos de “Flug Invites” en Bridge 48, un concepto muy personal. ¿Qué te impulsó a crearlo y cómo ha evolucionado?
“Flug Invites” nació del deseo de devolverle algo a Barcelona, una ciudad que me ha dado tanto. No habría sido posible sin Bridge 48, un espacio con el que me siento profundamente identificado por sus valores: música, cultura y conexión. Ya vamos por la tercera temporada y han pasado más de 100 artistas por nuestras cabinas.
Hemos creado un espacio único donde músicos consagrados y talentos emergentes pueden compartir desde la autenticidad y la comunidad.
Insert y Rezonanz marcaron una época en la escena techno de Barcelona. ¿Qué recuerdos tienes de esa etapa y crees que esa energía se puede recuperar hoy?
Fue una etapa increíble, tanto a nivel personal como para la ciudad. Entre 2013 y 2020 vivimos algo muy especial: libertad creativa, conexión real con el público y una comunidad vibrante.
La escena ha cambiado mucho; muchas de las personas de entonces ya no están en los clubs y las nuevas generaciones se relacionan diferente con la música. Aun así, creo que esa energía puede replicarse y podemos construir algo nuevo manteniendo ese espíritu.
La vara está alta, pero soy optimista.
¿Cómo ves la evolución reciente de la escena techno en Barcelona y hacia dónde crees que se dirige el sonido de la ciudad?
Es un tema complejo. Las redes sociales han cambiado el enfoque: la inmediatez ha reemplazado a la profundidad en muchos casos y hemos perdido espacios pequeños donde experimentar sin presión. Pero aún existen proyectos que apuestan por el contenido y la comunidad. Es ahí donde quiero estar.
Por eso nace Noizer, porque compartimos una visión de club como espacio de experimentación y respeto por la música.
Tu carrera ha sido una constante búsqueda artística. ¿Cómo sientes que ha evolucionado tu sonido y en qué fase creativa te encuentras actualmente?
Siempre he sido inquieto. Desde mis primeros tracks en los 90, mezclando house con tango, hasta hoy, he desarrollado proyectos con lenguajes propios porque necesito explorar. No siempre es lo más estratégico comercialmente, pero es lo que me mantiene vivo.
Ahora, además de Flug y Linkan Ray, tengo Jon & The Rabbit, una banda donde canto y programo, que me permite explorar nuevos lenguajes y emociones.
Con el auge del techno en el mainstream, ¿crees que el concepto de “underground” ha perdido su esencia?
Hoy existen dos escenas muy diferenciadas: una más visible, centrada en el marketing y la estética, y otra más discreta, que pone la música en el centro. Para mí, el underground es una cuestión de intención, no de estética ni de exposición.
Mientras haya gente buscando una conexión auténtica con la música, el underground seguirá existiendo.

¿Hay algún artista con quien te gustaría colaborar próximamente?
Muchos. Pero lo más importante para mí es la coherencia musical y humana. Hay artistas increíbles que quizá no tienen un gran nombre, pero conectan profundamente con la propuesta.
Me interesa más la afinidad que el currículum; todas mis colaboraciones han surgido por afinidad humana y musical, no por beneficio económico.
En un entorno donde la tecnología avanza rápidamente, ¿cómo crees que influirá en el futuro del techno y en las herramientas creativas para productores y DJs?
La inteligencia artificial puede agilizar ciertos procesos, darte ideas y ayudarte a salir de bloqueos, pero nunca reemplazará lo humano. El arte necesita errores, emociones y decisiones subjetivas. La intuición sigue siendo lo que guía mi música.
De todas tus producciones, ¿cuál sientes que te representa mejor hoy y por qué?
Cada proyecto representa un aspecto distinto de mi identidad musical. Flug es mi lado más directo y enérgico; un buen ejemplo sería “Move Around”.
Linkan Ray es mi expresión más conceptual, y el EP “Flight To Tokyo” refleja esa visión. Ahora estoy terminando música con Jon & The Rabbit, una aventura fuera de mi zona de confort que me permite explorar nuevos lenguajes y aplicar todo lo aprendido en estos años.
Para terminar, puedes describir en una frase qué se va encontrar el público a partir del próximo día 8 de mayo en la serie de eventos Noizer en Les Enfants?
Se encontrarán con un espacio donde se reivindicará el techno como lenguaje primitivo y moderno, creando un espacio seguro, libre y profundamente musical. Les esperamos.
Muchas gracias Sebas, ¡ha sido un placer como siempre! Nos vemos este jueves en Les Enfants
